Cómo identificar a una Zombi

¿Cuántas veces os habéis preguntado si sobreviviríais a un ataque zombi? Muchas seguramente. Pero para ello primero debemos saber cómo identificarlos y saber reaccionar ante ellos. Matar a alguien que no lo es, que podría haberte ayudado, puede resultar fatal, o al revés, no matar a alguno de ellos creyendo que no está infectado y que te descabece en cuanto de gires... No queremos eso, ¿verdad? Por esa razón os traigo otro manual escrito por mí. 

Cómo identificar a un Zombi

Este manual le ayudará a sobrevivir en una supuesta invasión zombi, ya que si no sabemos identificar a uno de ellos nuestra muerte es más que probable. Un zombi, originalmente, era un personaje propio de lugares donde se practicaba el vudú. Según ellos estaríamos hablando de muertos resucitados mediante magia negra para convertirlos en esclavos, pero con el paso del tiempo se le ha catalogado en la literatura fantástica como muerto viviente falto de inteligencia y jamás consciente de sus actos. Normalmente suelen atacar cuerpo a cuerpo y aún se debate la teoría de si pueden correr o se desplazan, como antiguamente se había dicho, lentamente, arrastrando los pies y con ambos brazos levantados a la altura de los hombros. Se les suele representar pálidos, con heridas profundas, ojos desorbitados, sangre alrededor de la boca e incluso desmembrados en cuanto a extremidades. Recientemente el cine ha representado su difusión como un virus que se transmite mediante la mordedura, aire o similares.

Para facilitar la comprensión llamaremos al sujeto zombi Infectado. Para identificar a un infectado primero debemos encontrarnos en un lugar habitado por ellos o cercano éste. Después ha de avistar a otro sujeto, sea cual sea su aspecto, ya que la transformación o metamorfosis, metafóricamente hablando, dura un tiempo variable, por lo tanto no debemos fiarnos de nadie. Primero escóndase en un lugar seguro para analizar al individuo detenidamente. Fíjese en la palidez de su supuesto enemigo y en sus marcas físicas como mordeduras, signos de lucha cuerpo a cuerpo y demás heridas… A continuación examine su comportamiento, forma de andar, nerviosismo, rabia, etcétera. Si no encuentra indicios de peligro acérquese y deje que él le vea, si no echa a correr hacia usted con cara de no haber comido en una semana no tiene de qué preocuparse aún. Háblele y mantenga una conversación, si grita cosas como “Buajhh yagh Bludhh Najjsdaggh sdscnahgg” corra y no mire atrás. No le coja cariño ya que podría estar infectado y en realidad espera a que confíe en él para abalanzársele al cuello y comerse todas sus entrañas, recuerde que los zombis adoran los cerebros y no tendrían piedad con el suyo.

En el caso de que esté totalmente seguro de que el individuo es un infectado tiene varias opciones para sobrevivir:

1. Atizarle con cualquier objeto contundente de su alrededor. Palancas, tubos, sillas, sartenes, la Biblia…
2. Atacarle con un arma blanca que posea o esté en su campo de visión. Un machete, una navaja, una daga, una espada, una katana, un shuriken…  Si está lejos corra lo más rápido que pueda y dirija el arma preferiblemente a la cabeza.
3. Huir a pies para qué os quiero. No se distraiga y corra sin parar hasta que no oiga ningún “Agghh bleeeghh tughiaagg”.
4. Utilizar armas de fuego contra el infectado disparando entre ceja y ceja, en la frente, en todo el cuerpo dejándolo hecho trizas o explosionándolo.

Espero que os haya sido de ayuda en vuestro ímpetu por saber más cosas sobre estos seres tan... ¿especiales? Si queréis saber más no tenéis más problema que buscar en Google, Wikipedia, consultar en libros o preguntarme... al final pensaréis que me dedico a resucitar muertos en mi tiempo libre.

Gracias y volveremos en el próximo capítulo.

R.R.